10 de julio de 2010

Gestión Universitaria


El sistema universitario está en crisis, el desorden impera -sobre todo- en las insitituciones de gestión estatal (universidades públicas) Muchos factores se aluden para explicar este problema: falta de infraestructura, financiamiento, personal.

Yo estoy convencido que el problema empieza -y termina- en la gestión.



Me permitiré aquí un par de licencias para exponer mi punto de vista, primero las definiciones (para evitar interpretaciones erradas)

Administrar: Distribuir adecuadamente los recursos (físicos, financieros, humanos) que dispone la institución para contribuir al cumplimiento de los objetivos planificados.

Gestionar: Planificar, organizar, supervisar y dirigir las acciones de los miembros de una organización para cumplir los objetivos.

Un buen administrador distribuye estratégicamente los recursos cuando éstos son escasos. Un buen gestor cumple los objetivos pese a las carencias de la organización.

El meollo del asunto está en la planificación de los objetivos que se deciden alcanzar y de las actividades para lograrlos.

Entonces las miradas están dirigidas en la labor que cumplen los gestores de la universidad (rector, vice rectores, decanos, directores y jefes de departamento)

La modificatoria a la Ley Universitaria, escribí a detalle sobre el tema aquí, indica que para elegir Rector y vice rectores ya no es imprescindible tener el grado de Doctor, lo que, en principio, puede sonar a facilismo con la consecuente pérdida de "calidad" en el proceso de selección.

He leído críticas a esta modificación argumentando que es necesario que los administradores y gestores de las universidades tengan el máximo grado académico, es más, especifican también que el grado debe ser en el área de su profesión, criticando los postgrados obtenidos en materias distintas (un ingeniero con doctorado en educación, por ejemplo)

Considero que poseer el postgrado académico es irrelevante para un cargo de gestión, lo que se necesita es experiencia en administración, gerencia, gobierno, desarrollo de proyectos, dirección de planes operativos, etc.

El gráfico que acompaña este artículo evidencia la pertinencia de las habilidades de un individuo dentro de los niveles de gestión (convenientemente adaptados al gobierno universitario) puede notar que las habilidades técnicas (la experticia y competencia académica y profesional) se usan menos a medida que se asciende en el nivel de gestíón, las habilidades humanas también disminuyen, pero en menor medida; son las habilidades conceptuales las que se exigen siempre a cualquier nivel.

Esto significa que un físico, historiador, médico o abogado que posea varios doctorados en su especialida y sea un referente en su campo, sin habilidad gerencial poco podrá hacer en la gestión de una universidad, facultad o programa.

Las habilidades humanas (persuasión, carisma, empatía, etc.) muy utilizadas en puestos que supervisan personal (jefe de personal, jefe de seguridad, jefes de departamento) tienden a usarse menos cuando se llega a niveles altos en gestión (Decano, vice rector, rector)

Son las habilidades conceptuales (previsión, estrategia, táctica) las que permanecen en uso a todo nivel y las necesarias para la planificación inteligente, que se adelanta a la situación y considera todas las posibilidades para elegir la que maximice el logro de objetivos, alcanzado el desarrollo sostenible.

A tomar en cuenta para las futuras elecciones universitarias.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

El espíritu de la ley tiende a que las autoridades universitarias sean aquellos docentes que han desarrollado una excelente carrera Académica al interior de la universidad, alcanzando los más altos grados académicos en sus especialidades; y, sobre todo en instituciones ACREDITADAS. Es cierto que se requiere de capacidades de gestión; pero ello es lo secundario pues para eso están los funcionarios de carácter operativo, gerentes y asesores. Pero quién más que una autoridad en el mundo académico conoce lo que debe ser una universidad, la investigación y producción de conocimientos en función a los requerimientos de la Sociedad? Ellos deben conocer con prospectiva el camino que le corresponde a la universidad.

Richard Torchiani dijo...

Me permito discrepar con su punto de vista, el asunto con la vida académica es que mientras más se avanza, más se especializa el conocimiento, hasta llegar al dilema que plantea Jesús Mosterín: "saber practicamente todo sobre practicamente nada"

Comparto que un Rector debe ser carismático y tener poder de convocatoria (que muchas veces se debe a su reconocimiento académico) pero un liderazgo de este tipo no garantiza una adecuada gestión.

Y si al final son los técnicos los que hacen el trabajo ¿qué aporte brinda el cambio regular de autoridades representativas?

Anónimo dijo...

La universidad peruana está como está debido a que no se ha valorado a los académicos que, por lo general no utilizan artimañas para llegar al poder. Sino hagamos un recorrido por las universidades nacionales del país y veremos cómo sus autoridades han alcanzado el poder.Estoy de acuerdo en que se debe conocer de gestión universitaria pero fundamentalmente se debe tener autoridad académica.

Richard Torchiani dijo...

Sin consideramos el supuesto que un docente con "autoridad académica" está exento de artimañnas y, necesariamente, su conducción está supeditada a la ética, justicia y moral... entonces estoy de acuerdo con su planteamiento: los académicos son los idóneos para ocupar los cargos de gobierno universitario.

Pero tengamos en cuenta que estos académicos son minoría en el sistema peruano y que, dada su especialización, probablemente estén inmersos en actividades de investigación y consultoría más que estar interesados en gestionar la universidad.

Si logramos convencer a estos profesionales para que contribuyan a reformar el poder, entonces habremos empezado el tan anhelado cambio.

(siempre y cuando el supuesto sea verdadero)

Anónimo dijo...

Si bien es cierto depende de muchos factores lograr calidad universitaria. Entonces empecemos por analizar y evaluar el sistema actual en base a que leyes, reglamentos y políticas está marchando? creo que es el primer paso y el punto de inicio para un cambio radical.

Richard Torchiani dijo...

Revisar el aparato normativo es el primer paso en el proceso de redefinir el sistema universitario.

Cosa bastante delicada en el contexto actual peruano.

¿Quiénes deben liderar el proceso? ¿los rectores? ¿los docentes? ¿los especialistas?

Lo fundamental para iniciar este proceso es el poder de convocatoria y la capacidad de consenso.

gestion universidades dijo...

El trabajo manual es muy redundante, incorrecta e incompleta por lo que tenemos que hacer nuestro trabajo escolar a través de software de gestión de la escuela.