19 de febrero de 2008

eL ArTe de ser ProducTivo

El verano arrecia por estas latitudes y el letargo físico se hace presente, como una forma de contrarrestar los efectos -nocivos- de estar expuesto a una elevada temperatura ambiental gracias a la polución diaria de Lima metropolitana. Atrás quedó el día en que decidí plasmar mi productividad: un par de libros esperan que mis manos y mi cerebro les den forma y fin, a la vez que un par de decenas de artículos-ensayos a medio hacer forman una paciente cola para que los atienda.





Ser productivo es tan simple como trazar el objetivo y elaborar un plan de acción que reparte la actividades paso a paso en un lapso estimado para concretar todo con cierta holgura... si el mundo tuviera la décima parte de personas que tiene actualmente, ser productivo sería así de sencillo.


Pero resulta que el mundo no tiene la décima parte de personas tratando de sobrevivir hasta el día siguiente, por lo que la productividad es un asunto sumamente complejo que requiere tiempo para asimilar contenidos básicos y forma de proceder para formar hábitos, que es el resultado y motor a la vez de la disciplina. Ésta es un pilar en el camino de la productividad, de la creación de información; para producir es necesario asegurar, además de una neurótica ansiedad, un caudal continuo de motivación.


Conformar un servomecanismo de conducta productiva es todo un arte, requiere de planificación y proacción (sobre todo esta última, puesto que la mayoría de personas son capaces de lograr con éxito la etapa de planificación, pero sólo unos cuantos logran sortear la etapa proactiva) la planificación nos indica el camino a seguir y la proacción no conduce por el camino que, a cada paso, va repitiendo el ciclo de idea- acción.


Lograr que una actividad se desarrolle con naturalidad, por lo tanto con facilidad y con sensación de esfuerzo mínimo, requiere de práctica constante y de niveles de jerarquía en aumento; si el servomecanismo ha logrado consolidarse, los niveles jerárquicos se desarrollarán sin problema, configurando un sistema sostenible y con tendencia a la complejidad.


El problema de no conseguir los objetivos planteados radica en el proceso de articulación, en cómo se configuran las acciones en cadenas de desempeño productivo, en la habilidad de identificar-supervisar el continuo de conductas (incluyo aquí el componente afectivo) para ser actor y espectador al mismo tiempo. Y lo que le da más complejidad al asunto: saber cuándo ser actor y cuándo espectador.


En resumidas cuentas, el arte de ser productivo, como todo arte, requiere de generar la habilidad de PLANIFICAR, la habilidad de ACTUAR y, por sobre todo, la habilidad de DECIDIR.
Si gustan de las mnemotecnias, entonces esto sería el PAD


Yo voy en el camino, viendo los resultados en la medida de mis esfuerzos, reciclando acciones en pro de mi actividad futura (a corto, mediano y largo plazo)... y estos post son parte de mi entrenamiento.


Para dejar constancia de que el PAD funciona.


Atentamente
Richard Torchiani G
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